Caracas, Agosto 2007. Joaquín Pereira (!Claro¡ - Cuerpo&Alma).- Te levantas y te das un baño. Sales al gimnasio y disfrutas de una profunda ducha cuando culminas los ejercicios. Haces algunas diligencias y al llegar a casa entras a la regadera para aplacar el calor. Llega la noche y antes de dormir vuelves a ducharte. Ten cuidado, podrías estar dañando el órgano más grande de tu cuerpo: La piel.Debido a que Venezuela es un país tropical sus habitantes no sufren los avatares de quienes deben asearse en otras latitudes más frías, por lo que los venezolanos no reparan en el número de veces que lo hacen durante el día.
Sobre nuestra piel habitan bacterias, hongos y parásitos que no producen ninguna enfermedad y más bien nos benefician pues sirven de escudo a una variedad de infecciones.
Para que la grasa natural de la piel no se pierda con el baño diario el producto de limpieza utilizado debe tener un pH neutro que no baje el nivel de acides de la epidermis requerida por la flora residente cutánea que ayuda a la no proliferación de microorganismos patógenos.
Es por esto que los especialistas en el área de la salud están alertando sobre el abuso en la utilización de jabones y demás productos de limpieza personal.
La dermatóloga venezolana Ketty Iskandarian comentó a ¡claro! que el uso exagerado de jabones con detergente produce el deterioro de la capa lípidica de las células de la piel (la que las mantiene humectadas) produciéndose resequedad y a la larga puede propiciar infecciones y alergias.
Además de disminuir el número de limpiezas profundas que se realicen del cuerpo, la especialista recomienda no usar geles o perfumes directamente sobre la epidermis. Recomienda también no ducharse con agua excesivamente caliente o estar en ambientes con aires acondicionados muy intensos.
Pero hay quienes van mucho más allá y sugieren no sólo disminuir el número de duchas que una persona toma a diario, sino también las partes específicas del cuerpo donde debería usarse jabón, dejando la limpieza del resto sólo con agua.
Así lo recomienda a los lectores de ¡claro! el también dermatólogo Alexis Lara, quien actualmente da consulta en el Hospital Clínico Universitario de Caracas. "Los jabones con detergentes sólo deberían usarse en las axilas, los genitales y los pies", aconsejó.
Lara también refuta la creencia popular de que el jabón de panela o azul es bueno para la piel. "Es uno de los más abrasivos", asegura y recomienda más bien los de glicerina, que además de ser más económicos que otros, son más ecológicos y no desintegran la capa protectora de la piel.
Al momento de comprar un producto de limpieza personal los especialistas sugieren conocer el tipo de piel que se posee - a saber, seca, normal o grasa -pues existen productos especialmente elaborados para cada una de ellas.
El doctor Lara recomienda también hacer un hábito el acompañar la limpieza corporal con el uso de cremas hidratantes que ayuden a evitar la resequedad de la piel.
Dice que cada persona debe reconocer si la presencia de algún escozor, resequedad o descamación sean causados por el uso de un limpiador en específico.
“Si un producto genera una reacción desfavorable hay que dejarlo de utilizar de inmediato y acudir a la consulta de un dermatólogo para apalear los daños acaecidos, que en algunos casos puedes ser irreversibles”, afirmó.
7 puntos a tomar en cuenta para cuidar la piel
1. Permitir la buena ventilación corporal con ropas que mantengan la humedad y la temperatura normal del cuerpo.
2. Usar jabones con pH neutro y evitar el uso excesivo de detergentes o jabones que alteren el pH de la piel.
3. No usar jabones germicidas para el baño diario porque eliminan la flora normal provocando como consecuencia sequedad de la piel e invasión de bacterias patógenas que producirán prurito, ezcemas y lesiones por contaminación bacteriana.
4. Los que tienen pieles muy sensibles y especialmente los bebés y los niños deben evitar usar los jabones perfumados, de color y germicidas por contener sustancias químicas irritantes.
5. Las personas de la tercera edad deben cuidar más de la hidratación de su piel. Se recomienda el uso de las llamadas cremas frías.
6. Hay que fijarse que los jabones que compremos tengan en sus envases la información sobre el pH del mismo, y si tiene perfumes, germicidas y colorantes.
7. El aseo de manos antiséptico o quirúrgico es el único tipo de lavado local que requeriría del uso de antimicrobianos.
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